Educación en alternancia y bienestar en el medio rural fueron abordados por el ingeniero David Baumann, director de ProRural, durante el coloquio “Ecología integral y Cultura del encuentro”.
Por Elena Belletich Ruiz. 06 noviembre, 2015.Durante el coloquio, David Baumann, director de la asociación civil ProRural, abordó el tema “Educación en alternancia, cultura del encuentro y bienestar en el medio rural”. En su exposición, recordó que el papa Francisco ha reiterado esa triple relación vital para el hombre: la relación con Dios, con el prójimo y con la tierra, que debe mantenerse para lograr el desarrollo humano. Señaló que toda acción humana afecta a todos y que el respeto mutuo y la responsabilidad son importantes para pagar esa deuda ecológica de la que habla el Papa, que no solo es un problema del norte del mundo sino de todos.
El coloquio “Ecología integral y cultura del encuentro” se desarrolló en Campus Piura y Lima con el fin se generar diálogo sobre economía inclusiva, educación, responsabilidad social, pobreza, espiritualidad y ecología integral a la luz de la Carta Encíclica Laudato si del papa Francisco. Con este objetivo, expertos profesionales comentaron diversas experiencias y acciones para alcanzar estas metas.
Todo influye
David Baumann explicó que cada acción del hombre afecta y daña la naturaleza. Por ejemplo, explicó, afecta –y mucho– la tala que se produce en Madre de Dios y la del bosque ecológico de Amazonas para hacer agricultura; para cultivar unos misérrimos campos de maíz. Todo ello, influye, y también lo hace la progresiva desaparición de los valles de Lima y la anunciada construcción de un aeropuerto en Chincheros (Cusco) que privará a generaciones futuras del placer de admirar espectaculares paisajes. Todo influye y causa pobreza y hay que hacer algo, advirtió.
Señaló que si bien la ciencia y la tecnología son importantes y son también indicadores del crecimiento económico de una región, estas no son lo primordial, sino, como dice el Papa, “lo fundamental es conservar la naturaleza, y devolverle la importancia al ser antes que el tener; y, sobre todo, y cuidar el capital humano. “El hombre es un ser social que puede ser feliz con muy poquito”, recordó.
Al referirse a los problemas de la educación, mencionó que –pese a las mejoras– esta es de mala calidad porque los contenidos que se dictan no son pertinentes y tampoco son adecuados los medios y los procesos. Asimismo, sostuvo, el profesorado está abandonado y maltratado por el Estado y tiene un bajo nivel; falta equidad, dijo.
Como alternativa para mejorar la calidad de la educación y mantener esa relación con la naturaleza y con la tierra, explicó el funcionamiento, los objetivos, los medios y otros detalles de los Centros Rurales de Formación Alternativa (CRFA) que busca la formación integral de los jóvenes y el desarrollo del medio, en dos espacios: la escuela y la familia.